El Trastorno Obsesivo Compulsivo se manifiesta por la presencia de obsesiones o compulsiones recurrentes que llevan a la persona a un malestar general, a un deterioro de su vida cotidiana o a perder tiempo de forma significativa.

Una obsesión es un pensamiento, impulso o imagen de carácter persistente que la persona no quiere tener, y que considera irracionales o exagerados.

Una compulsión es un comportamiento recurrente, cuya finalidad es aliviar el malestar –lavado de manos, ordenar objetos, comprobaciones reiterativas, conductas mentales como contar, etc.–